Stephen Hawking y Elon Musk, junto con cientos de investigadores y expertos en inteligencia artificial, advierten al mundo de la necesidad de prohibir las llamadas "armas autónomas", advirtiendo que podrían iniciar una revolución en el armamento mundial.
En una carta, dada a conocer mientras los investigadores se reunían en la Conferencia Internacional sobre Inteligencia Artificial en Buenos Aires el año pasado, los participantes sostenían que el desarrollo de robots capaces de matar mientras interactúan con operadores humanos será posible dentro de años, no de décadas. Si el desarrollo no se detiene, es sólo cuestión de tiempo quede armas que acaban en manos de terroristas y traficantes, dijeron.
A diferencia de los drones, que dependen de una persona que los controle a distancia, las armas autónomas buscarían y atacarían los objetivos por sí solas. A diferencia de las armas nucleares, que podrían fabricarse con materias primas que todas las potencias militares podrían permitirse y obtener, lo que facilitaría su máxima producción, argumentaron los autores.
Las armas podrían reducir las bajas militares al mantener a los soldados humanos fuera de los campos de batalla, pero también reducirían el umbral para entrar en combate, dice la carta. "Si cualquier potencia militar importante sigue adelante con el desarrollo de armas de Inteligencia Artificial, será inevitable una carrera armamentística mundial, y el punto final de esta trayectoria tecnológica es obvio: las armas autónomas sise convertirán en los Kalashnikov del mañana (en referencia al ruso Mikhail Kalashnikov, creador del AK-47)", dijo.
Elon Musk, el cerebro detrás de SpaceX, ya había enfatizado los peligros sobre la Inteligencia Artificial, calificándola como "la mayor amenaza para la existencia humana" Stephen Hawking, el físico y cosmólogo, escribió que si bien el desarrollo de la Inteligencia Artificial podría ser el mayor evento en la historia de la humanidad, "desafortunadamente, también podría ser el último".
La carta dice que la Inteligencia Artificial "tiene un gran potencial para beneficiar a la humanidad de muchas maneras". Los defensores prevén aplicaciones en la lucha contra las enfermedades, la disipación de la pobreza y la ayuda al rescate. "Una asociación con el armamento, creo, podría desencadenar una reacción que frenaría su avance", dijo el autor.
Otros participantes destacados en la carta son Steve Wozniak, cofundador de Apple; Noam Chomsky, lingüista y filósofo político; y Demis Hassabis, director ejecutivo de Google DeepMind.
Publicado originalmente en The New York Times con el título Elon Musk and Stephen Hawking Among Hundreds to Urge Ban on Military Robots y traducido por Elisson Amboni.